domingo, 21 de septiembre de 2014

Alberto Lamelas indulta un eral de Laurentino Carrascosa en el Festival de La Puerta

RICARDO CASTILLO
Faena templadísima de David Valiente y lucimiento de Jesús Alvárez en un encierro bravo y repetidor del hierro ciudadrealeño. Hacía tiempo que no se veía en La Puerta de Segura torear de capote como lo han hecho los diestros este sábado, víspera de San Mateo.

Por segundo año consecutivo, el ayuntamiento puertense organizó el Festival a beneficio de las obras de la nueva plaza de toros de La Puerta de Segura. Buen sabor ha dejado en los aficionados el noble encierro de Laurentino Carrascosa Gómez, cinco novillos procedentes de Retuerta del Bullaque, provincia de Ciudad Real, que fueron bravos, humillaron y propiciaron el éxito del festejo en una tarde apacible, propia del inminente otoño.

Con media entrada, cabe destacar el marchamo serio del Presidente, el concejal Jesús Cózar, que ha dejado patente la intención de no regalar trofeos, en este coso, en lo sucesivo. La ficha del Festival se resume así:

Raul Martín Burgos, a caballo, consiguió lidiar al encastado primero con vistosidad y cuarteando muy bien en la suerte de banderillas, destacando con las cortas, siendo la tercera "al violín". No redondeó con el rejón de muerte, descabalgó, descabelló y recibió una oreja.

Martín de Vidales se enfrentó animoso al más manso de la tarde alargando la suerte y ofreciendo repertorio. Una oreja.

David Valiente va creciendo conforme avanza el mes y, tras lo bien hecho en Andújar y Cazorla, se abandonó con la muleta en una faena variada y muy templada. Sonaron rotundos olés en las tandas con la derecha, al natural y con su toreo en redondo. Estocada entera y dos orejas.

Alberto Lamelas impuso su sitio, su arte y su cadencia para acompasar la fiereza inicial del bravo cuarto que repartió con el capote y con la muleta. Tandas lentas y multicolores, rematadas de pecho, repitiendo con infinita nobleza. El maestro lleva dos temporadas sublimes y enardeció al tendido con esos pies sellados al albero y esa inagotable y fina forma de mandar. El novillo fue indultado, el primer astado que libera el de Cortijos Nuevos en su carrera, recibiendo su jubiloso lidiador las dos orejas y rabo simbólicos.

Jesús Alvárez tampoco quiso desaprovechar la mecha del quinto y mostró su buen hacer, evidenciando el sevillano de Camas que está haciendo paseillos, toreando bien y conectando con el publico. Estocada certera y dos orejas.

¿Y los brindis qué?. Pues el toledano Martín de Vidales brindó al alcalde, Jesús González; el iliturgitano-genavero de La Ropera, David Valiente, hizo lo propio a su amigo Eufrasio Armero; el segureño Alberto Lamelas a Javier García "El Mayoral" y, al público, el triunfador de "La suerte está echada", Jesús Alvárez.




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